domingo, 27 de julio de 2008

LA VOZ QUE ESCUCHO

Escucho en mi interior el consejero,
que su voz en mi pecho, se destapa,
con rigor esencial y verdadero.

Conmigo en mi vivir, es compañero,
lo conozco y lo siento en cada etapa
es amigo; condena y no me tapa
golpea en torno a mi, es "carcelero".

Si yo escucho la voz de su censura,
tercamente castiga con sus quejas,
y tiembra mi interior con sus destellos.

Al margen su rigor, de mi ternura,
me marca su distrito con sus rejas,
y en cada oficio, justo pone sellos.

poema de maika ilusion.

No hay comentarios: